Características
El tomate es el fruto de la planta de la tomatera. Aunque se suele consumir en los platos principales como si fuera una hortaliza, realmente es una fruta. Se cultiva en todo el mundo y se toma tanto fresco como procesado (salsas, zumos, enlatados).
Origen y variedades
Procede de México principalmente, pero hoy día está presente en todos los países. Las variedades de este fruto son muchísimas, según el lugar donde se cultive, la forma que tenga (alargado, redondeado, aplanado, de pera, tipo cherry) y su color (rojo brillante, verdoso, negro, amarillento, blanco, marrón).
Propiedades
El tomate está formado fundamentalmente por agua e hidratos de carbono: azúcares simples que le dan un sabor dulce y ácidos orgánicos que le dan el toque ácido. Se trata de un alimento poco calórico, fuente de numerosas vitaminas (A, B y C) y minerales (potasio, fósforo, magnesio, calcio). Sin embargo, contiene poco sodio, por lo que es ideal para hipertensos.
Presenta carotenoides (el licopeno es el que le da el color rojo), antioxidantes, fibra, malatos y citratos. Todos estos componentes lo hacen ideal para nuestro sistema circulatorio y digestivo.
En gastronomía
El tomate es un ingrediente fundamental en platos como el gazpacho o el salmorejo, y también se utiliza mucho en ensaladas, mermeladas, gratinados, salsas, sofritos y guarniciones, tanto crudo como cocinado.
El tomate en lata se puede utilizar en muchas recetas, y nos permite comer esta fruta todo el año, aunque no esté en temporada. También se preparan zumos de tomate, aunque cuando hace calor no hay nada como una ensalada o un buen gazpacho fresquito.