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Sopa de miso japonesa con caldo dashi casero. Receta tradicional

245 min
Sopa de miso japonesa con caldo dashi casero. Receta tradicional

Ingredientes para 4 personas

  • Para preparar el caldo dashi casero:
    • 15 g de alga kombu.
    • 20 g de copos de bonito seco o Katsuobushi.
    • 1 litro de agua.
  • 1 cucharada sopera de alga wakame seca.
  • 4 setas shiitake (opcional). Yo he utilizado frescas pero abajo en la sección de Consejos verás cómo utilizar setas shiitake deshidratadas.
  • 1/4 cebolleta fresca (tanto la parte blanca como la verde).
  • 150 g de tofu blando.
  • 3 cucharadas soperas de pasta miso.

Esta receta está basada en la forma más tradicional de prepararla aunque existen varias versiones y a cual más rica. La clave está en conseguir los ingredientes que se necesitan (más abajo en la sección de Consejos te cuento en qué tipo de tiendas se pueden comprar) y preparar primero un caldo dashi casero que es la base de esta sopa y después añadir la pasta de miso y demás ingredientes para completarla. Se trata de una sopa de acompañamiento, ideal para servir en un pequeño cuenco y acompañar una buena sesión de sushi casero o sashimi por ejemplo. Verás en la receta recomendaciones para saber hasta qué punto calentar los ingredientes, que no deben llegar a hervir en ningún momento.

Cómo hacer sopa de miso japonesa con caldo dashi casero

  1. Limpia los trozos de alga kombu con un paño húmedo para retirar el polvo blanco que suele tener.

    Alga kombu y copos de bonito seco o katsuobushi

    Así son el alga kombu y los copos de bonito seco o katsuobushi

  2. Pon en una olla pequeña 1 litro de agua junto con el alga kombu y enciende el fuego para que esté a temperatura suave.
  3. Cuando veas que el agua empieza a burbujear un poco y está a punto de hervir saca un trozo de alga kombu, pínchala con un tenedor y si notas que está tierna (se queda la marca del tenedor) aparta la olla del fuego y retira los trozos de alga kombu.

    Alga kombu para caldo dashi

    Cocinamos el alga kombu

  4. Echa en el agua los copos de bonito seco y espera 3 o 4 minutos a que se hayan ido al fondo de la olla.

    Copos de bonito seco o katsuobushi para caldo dashi

    Añadimos el katsuobushi

  5. En ese momento cuela el líquido y ya tenemos listo el caldo dashi con su característico color dorado.

    Caldo dashi japones casero

    Ya tenemos listo el caldo dashi japonés casero

  6. Echa el alga wakame en un cuenco con agua fría para que se hidrate, en menos de 10 minutos estará lista para usarse.

    Alga wakame seca

    Rehidratamos el alga wakame

  7. Limpia las setas shiitake de posibles restos de tierra con un paño húmedo y córtalas en rodajas.
  8. Retírale a la cebolleta las raíces y las posibles partes secas de la zona verde, lávala bien y utiliza solo un cuarto. Córtala en rodajas.
  9. Corta el tofu en cubos.

    Ingredientes sopa miso

    Preparamos los ingredientes de la sopa miso

  10. Pon el caldo dashi en la olla a fuego medio-suave y echa en él las setas shiitake. Cocínalas durante unos 10 minutos procurando que el caldo al final no llegue a hervir pero que esté a punto de hacerlo.

    Setas shiitake para sopa miso

    Cocinamos las setas shiitake en el caldo dashi

  11. Apaga el fuego y echa la pasta miso en un colador.

    Pasta miso sopa

    Ponemos la pasta miso en un colador

  12. Sumérgelo en el caldo dashi y remueve con una cuchara para que el miso pase a través de él y se disuelva bien. Verás que quedan algunos trocitos blancos en el colador, deséchalos.

    Sopa pasta miso

    Diluimos la pasta miso en el caldo

  13. Echa en la olla el tofu, el alga wakame escurrida y la cebolleta, enciende el fuego a temperatura media y cuando esté a punto de hervir retira la olla y ya tienes la sopa miso lista.
    Sopa miso japonesa casera

    Ya tenemos lista la sopa miso japonesa casera

    Como hacer sopa de miso japonesa con caldo dashi casero. Receta tradicional

    Así de fantástica queda la sopa de miso japonesa casera

Tiempo: 45 minutos

Sirve y degusta

Para tomar la pasta de miso correctamente y conservando todas sus propiedades no debe llegar a hervir así que lo ideal es realizar toda la preparación y justo antes de servirlo incorporar la pasta miso y el resto de ingredientes porque no es conveniente recalentarlo después. Igualmente si te sobra sopa de miso puedes conservarla en la nevera 2-3 días pero al calentarla de nuevo procura que no llegue a hervir.

Se trata de una sopa con un sabor bastante particular, suave y reconfortante y llena de ingredientes con diferentes texturas. Disfruta de la ternura del tofu, el aroma de las setas y el sabor de las algas, sin duda alguna es una sopa de auténtico… ¡escándalo!

Receta de sopa de miso japonesa con caldo dashi casero. Receta tradicional

Sopa de miso japonesa con caldo dashi casero. Receta tradicional

Variaciones

Si no tienes a mano los ingredientes del caldo dashi puedes recurrir a caldo dashi en polvo que suelen vender, no es lo mismo pero es una alternativa sencilla para tener lista esta receta en un momento.

Incorpora otras verduras a tu gusto, por ejemplo setas de otro tipo, un poco de col o repollo (y si es col china pak choi mejor que mejor), puerro en tiritas… lo que prefieras.

Consejos

La mayoría de ingredientes los vas a encontrar solamente en establecimientos de ingredientes asiáticos y, aunque se podrían sustituir algunos ingredientes por otros, lo cierto es que para preparar esta receta y que se parezca un poco a lo que se busca tienes que contar con todos o casi todos los ingredientes. Lo bueno es que además de tiendas físicas también hay muchas tiendas online que los tienen disponibles y a buen precio.

Si las setas shiitake que vas a utilizar son secas deberás rehidratarlas. Para ello, primero lávalas un poco con agua fría y ponlas en un recipiente cubiertas con agua a temperatura ambiente, que no esté muy fría pero tampoco caliente, y durante alrededor de una hora o hasta que estén tiernas. Eso si, deberás poner encima un plato o similar para forzar que queden sumergidas y no floten. Si tienes prisa siempre puedes sumergirlas menos en tiempo en agua templada o incluso caliente, aunque esto puede hacer que pierdan un poco de sabor. Después retírales el rabito ya que suele permenacer un poco duro, y el agua de remojo está tan sabrosa que puedes utilizarla como caldo para añadirlo al de esta elaboración o reservarlo para cualquier otra (una sopa, un arroz, un guiso…).

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