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Pasta Alfredo con la famosa salsa Alfredo

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225 min12
Pasta Alfredo con la famosa salsa Alfredo

Ingredientes para 2 personas

  • Para la salsa Alfredo:
    • 100 ml de nata.
    • 50 ml de leche.
    • 1 diente de ajo.
    • 30 g de queso parmesano.
    • 1 cucharada sopera de mantequilla.
    • Sal y pimienta negra recién molida.
  • Para la pasta:
    • 160-200 g de pasta, preferiblemente fetuccini o tallarines (la ración de pasta suele estar entre unos 80 g y 100 g).
    • Sal.

Tiene su particular historia ya que surgió de una variante de Alfredo di Lelio de una receta tradicional italiana, los «fettuccine al burro», es decir, con mantequilla, y años después se popularizó gracias a que unos conocidos actores americanos la probaron y les maravilló, y no dudaron en prepararla a sus amigos en Hollywood, de ahí que sea una receta más conocida en Estados Unidos que en la propia Italia. Consiste en regar la pasta con una salsa en la que no solo hay mantequilla sino también nata, ajo y queso parmesano.

Preparación, cómo hacer pasta Alfredo

  1. En primer lugar preparamos los tallarines: pon abundante agua en una olla (que después cubra de sobra la pasta) a fuego fuerte hasta que hierva. Cuando hierva, incorpora una cucharadita de sal y la pasta, y cuando vuelva a hervir, deja que se cueza durante los minutos que indique el paquete (en este caso son 8).

    Cociendo pasta tagliatelle

    Cociendo los tagliatelle

  2. Cuando se cumpla el tiempo de la pasta, escúrrela y sin que se enfríe ponla en los platos con la salsa Alfredo, que la habremos elaborado mientras se calentaba el agua y se cocían.
  3. Ahora vamos a preparar la salsa Alfredo. Pela el ajo y pícalo muy finito, y ponlo en una sartén junto con la mantequilla, a fuego medio.
  4. Cuando empiece a dorarse, echa en la sartén la nata y la leche junto con una pizca de sal y pimienta negra recién molida al gusto, y deja que hierva durante 2 o 3 minutos para que espese un poco.
  5. Ralla el queso parmesano, échalo a la sartén y revuélvelo todo junto un par de minutos. Si la quieres más espesa déjala más tiempo en el fuego, pero si por el contrario  la quieres más líquida, échale un poco más de leche. Lo ideal es que sea una salsa más bien líquida que densa.

    Salsa Alfredo

    Preparando la salsa Alfredo

  6. Pon la salsa sobre la pasta que es como más bonito queda, o también puedes mezclarlo todo para que la pasta se impregne rápidamente de la salsa.

Tiempo: 25 minutos

Sirve y degusta

Este plato está deliciosísimo bien caliente y sobre todo recién hecho, además se prepara de forma tan rápida que no hay necesidad de elaborarla con antelación. Aún así, puedes tener la salsa lista de antemano, y cuando vayas a comer cueces la pasta y listo.

Si quieres puedes espolvorear más pimienta por encima, y también cómo no queso, a quienes son muy queseros como nosotros ese puntito nos encanta. Desde luego con esta receta se demuestra que cuanto más sencilla es la receta de pasta, más rica está, de… ¡escándalo!

Receta de pasta Alfredo con la famosa salsa Alfredo

Pasta Alfredo con la famosa salsa Alfredo

Variaciones

Puedes preparar esta misma receta pero con otro tipo de pasta. Te recomiendo algún tipo de pasta que pueda enrollarse, ya que para las salsas es la ideal, como por ejemplo los espaguetis es una buena opción. Sin embargo, no descartes las espirales o similar, le dan un punto distinto y riquísimo.

La pasta Alfredo solo llevaba en sus orígenes dos ingredientes, queso parmesano y mantequilla, así que puedes animarte a prepararla de esa sencilla forma. Y las versiones posteriores incluyeron nata o bechamel, y también otros ingredientes como ajo, verduras, mariscos, perejil o incluso pollo, así que puedes preparar esta receta con el toque que más te guste.

Consejos

Si quieres aligerar un poco esta receta, puedes sustituir la nata por crema de leche o alguna variante baja en calorías, aunque la idea de combinar nata y leche da un resultado muy bueno.

Para un resultado óptimo con los platos de pasta con salsa, ten la salsa lista, y si es caliente, bien caliente. Así, nada más escurrir la pasta mézclala con ella para que se impregne de su sabor y te quede de… ¡escándalo!