Masa de pizza en Thermomix. Casera, riquísima y fácil

Ingredientes para 2 pizzas redondas o 1 pizza rectangular del tamaño de la bandeja de horno

• Para la masa de pizza:
  • 300 g de harina de trigo de fuerza.
  • 7 g de levadura fresca (o 2 g de levadura seca de panadería).
  • 1 cucharadita de sal.
  • 15 g de aceite y un poco más para untar el bol donde la dejemos fermentar.
  • 200 ml agua.
• Ingredientes sobre la pizza (cantidades al gusto):
• Salsa de tomate, tomate frito o tomate concentrado. Lo ideal es que tenga una textura más bien densa para que no moje en exceso la masa y así pueda subir bien en el horno.
• Queso mozzarella rallado.
• Champiñones frescos.
• Aceitunas negras.
• Unas hojas de albahaca fresca.

Riquísima y lo mejor de todo es que es muy fácil de preparar y se amasa en tiempo récord, aunque después necesita su tiempo de fermentación. La masa queda con los bordes crujientes y un interior esponjoso repleto de aire, lo que hace que sea muy apetecible. Esta vez he optado por ponerle ingredientes clásicos como el tomate, la mozzarella, las aceitunas o los champiñones, sin olvidar un toque de albahaca fresca. A partir de ahí puedes añadir ingredientes a tu gusto e ir probando nuevas combinaciones.

Preparación, cómo hacer masa de pizza en Thermomix

1. Pon en el vaso de la Thermomix el agua junto con la levadura y mezcla durante 20 segundos a velocidad 2.
   

   Mezclamos el agua con la levadura

2. Incorpora la harina de fuerza, la sal y el aceite y amasa durante 2 minutos y velocidad Espiga.
   

   Añadimos el resto de ingredientes para la masa de pizza

   

   Ya tenemos amasada la masa de pizza con la Thermomix

3. Engrasa con un poco de aceite el bol que vayas a utilizar para dejar reposar la masa.
4. Saca la masa del vaso de la Thermomix, dale con tus manos forma de bola y déjala en el bol tapada con un paño ligeramente húmedo o con un gorro de ducha desechable (va fenomenal este truco, se adaptan a casi cualquier bol y puedes reutilizarlos).
   

   Así queda la masa de pizza hecha una bola

5. Espera a que doble su volumen, tardará alrededor de 1 hora dependiendo de la temperatura ambiente (lo ideal es dejarla en un lugar cálido y sin corrientes de aire).
   

   Ya se puede apreciar que ha doblado el volumen

6. Corta la masa en dos partes si lo que quieres es formar 2 pizzas y pon cada una sobre papel de horno. Yo además suelo espolvorear un poco de harina gruesa, en este caso ha sido sémola de trigo duro, ya que me gusta la textura granulada que le da a la pizza por fuera pero esto es opcional y al gusto.
   

   Ya tenemos formadas las dos pizzas

7. Empieza a precalentar ya tu horno con calor arriba y abajo y ventilador ya que cuanto más caliente esté, mejor quedarán las pizzas. Lo ideal serían 250ºC pero con 220ºC también puedes hornearlas.
8. Te recomiendo estirarla con tus propias manos aunque también puedes utilizar un rodillo, y si ves que se pega un poco puedes echar un poco de harina de trigo por encima para que te resulte más sencillo.
9. Pon sobre las bases de pizza los ingredientes que prefieras. Yo en este caso le he puesto una capa de salsa de tomate, otra de queso mozzarella y por último unas aceitunas negras y unos champiñones en láminas.
   

   Empezamos a poner los ingredientes sobre la pizza

10. Un truco para que los champiñones no llenen de líquido la pizza es cortarlos en rodajas y meterlos al microondas en un recipiente durante 1 o 2 minutos, hasta que que veas que han reducido su volumen, están un poco blandos y han soltado líquido.
    

    Ya podemos meter la pizza en el horno

11. Pon la pizza con el papel de horno sobre una rejilla de tu horno a la altura más baja y hornéala hasta que esté a tu gusto. En mi horno suelen tardar unos 8-10 minutos hasta que veo que el queso está derretido y empieza a dorarse, y también se doran los bordes de la pizza.
12. Truco para que te quede especialmente crujiente: coloca la pizza con su papel de horno directamente en la base del horno, sin bandeja ni nada (esto lo puedes hacer si tu horno NO es de gas), y déjala ahí 3-4 minutos para que se dore la base y quede crujiente. Súbela a una altura por encima de la mitad en el horno sobre una rejilla y deja que se termine otros 4-5 minutos o hasta que la masa y el queso estén dorados.
13. Deja que repose un par de minutos y coloca las hojas de albahaca, ya que si las pones sobre la pizza cuando aún está muy caliente, la albahaca se pondrá de color oscuro y no quedará muy estética.
    

    Así de apetecible queda la pizza con masa hecha con Thermomix

    

    Tiene un corte estupendo y los bordes crujientes

Tiempo: 2 horas incluyendo reposo de la masa

Sirve y degusta

Sirve la pizza nada más salir del horno, bien calentita. Colócala sobre una tabla o superficie con su papel de horno y córtala en 8 triángulos si es redonda, o en cuadrados si es rectangular. Si te sobra no te preocupes, puedes recalentarla al día siguiente en el horno durante unos minutos y estará riquísima, y si tienes más prisa puedes hacerlo también el microondas, aunque en este caso te recomiendo sacarla en cuanto haya un poco de vapor saliendo de ella para evitar que se seque demasiado.

Es una masa que queda espectacular ya que tiene una textura interna esponjosa y con aire pero por abajo y sobre todo por los bordes está crujiente y doradita. Acompáñala con los ingredientes que más te gusten y disfruta de un bocado de auténtico… ¡escándalo!

Masa de pizza en Thermomix. Casera, riquísima y fácil

Variaciones

Si quieres preparar la masa con antelación y hornearla otro día, tan solo déjala directamente hecha una bola en un recipiente cerrado en la nevera y ahí puede estar hasta 5 días, así que en el momento en el que quieras utilizarla sácala de la nevera, espera una media hora a que deje de estar fría, dale forma, ponle los ingredientes y al horno. Ese reposo en nevera hace que fermente de manera lenta y queda fenomenal.

A la otra pizza que hice le puse tomate, cebolla fresca cortada en tiras, queso, atún y alcaparras, es una de mis combinaciones preferidas y te animo a probarla. En ocasiones también añado unas anchoas o pimiento rojo en rodajas finas.

Consejos

La cantidad de salsa de tomate puede cambiar la textura de la pizza: si la quieres más jugosa, ponle bastante salsa, pero si prefieres que guarde un puntito crujiente y que suba en el horno, no te pases mucho.

Hay muchas recetas de masa de pizza, para mi esta es mi preferida porque tiene un equilibrio entre el resultado final y su manipulación. Hay otras masas de pizza más fáciles de manipular ya que llevan una mayor proporción de harina pero luego no quedan tan esponjosas y crujientes.