Gulas al ajillo con gambas

Las recetas que se elaboran salteando ingredientes son mi perdición. Es una forma sencilla y en ocasiones muy sana de preparar los alimentos y perder poco tiempo en la cocina. Para ello es necesario seleccionar las combinaciones de ingredientes ganadoras, como ésta que traemos hoy.
Las gulas al ajillo con gambas son un aperitivo muy socorrido, típico de las comidas y cenas de Navidad, aunque tan delicioso que apetece en cualquier momento del año. Está listo en apenas unos minutos, y el toque especial lo ponen los ajos y las guindillas.
Si te gusta esta receta, puedes coger un montón de ideas de nuestros aperitivos a base de mariscos, como estos mejillones al vapor o los mejillones a la marinera, pasando por los sencillísimos berberechos en salsa verde que se preparan al vapor, sin olvidar los calamares encebollados que siempre triunfan. Otra opción muy original y sabrosa son estas huevas de pescado aliñadas con salsa verde, en cuya receta te damos trucos para que no se te peguen ni salten y te queden perfectas 🙂
Y si lo tuyo es el ajillo, tenemos opciones para todos los gustos. Prueba nuestras setas al ajillo con jamón, las setas al ajillo con gulas o las clásicas gambas al ajillo, las estrellas de toda mesa navideña. Eso sin dejar de lado el tradicional pollo al ajillo, y de guarnición unas riquísimas patatas fritas al ajillo.
Ingredientes para hacer gulas al ajillo con gambas (aperitivo para 4 personas):
- 600 g de gulas.
- 300 g de gambas (pueden ser frescas o congeladas, siendo estas últimas más económicas y con las que se obtiene un buen resultado).
- 4 dientes de ajo.
- 4 guindillas (esto va en gusto, a nosotros nos gusta que se noten bastante).
- Aceite de oliva virgen extra y sal.
- Perejil.
- ¡Pan para mojar!
Preparación, cómo hacer gulas al ajillo con gambas:
- Si las gambas que vas a utilizar están congeladas y se te ha olvidado dejarlas en la nevera con unas horas de antelación para que se descongelen, sumérgelas en un cuenco con agua fría y tan solo necesitarán entre 30 minutos y 1 hora para descongelarse de forma rápida.
- Deja las gambas perfectamente peladas, sin cáscaras y limpias. Si utilizas gambas congeladas peladas no tendrás que realizar este paso.
- Pela los dientes de ajo y córtalos en rodajas finitas.
- Ponle aceite de oliva a una sartén hasta que cubra de sobra todo el fondo, y añade los ajos y las guindillas. Deja que se vayan dorando a fuego medio.
Dorando los ajos y las guindillas
- Cuando el ajo empiece a tener un color ligeramente dorado, escurre las gambas y añádelas a la sartén.
- Añade también las gulas y un poquito de sal.
Salteando las gulas al ajillo con gambas
- Sube el fuego y deja que se cocinen durante un par de minutos, y ¡listo! Si te gusta, espolvorea un poco de perejil por encima.
Gulas al ajillo con gambas
Tiempo: 20 minutos más 30 minutos previos de reposo
Dificultad: fácil
Sirve y degusta:
Procura que este plato llegue a la mesa calentito. Para ello, puedes servirlo recién hecho, o si lo has preparado con antelación, dale un golpe de calor en la sartén antes de servirlo. Puedes ponerlo al centro de la mesa, o repartirlo directamente en los platos de los comensales.
A nosotros nos encanta comernos esta receta acompañándolas con un poco de pan, y finalmente cuando las hemos terminado, mojamos el aceite que ha quedado, que estará picantito y de… ¡escándalo!

Gulas al ajillo con gambas recién hechas
Variaciones de la receta de gulas al ajillo con gambas:
Cuando dejas en remojo las gambas, puedes añadir un chorrito de vino blanco para que cojan un poquito de sabor, y después al incorporar las gambas y las gulas, puedes añadir un par de cucharadas del líquido de remojo de las gambas. El alcohol para cocinar da un toque estupendo a todo lo que toca.
Puedes modificar las cantidades de ajo, guindilla y aceite como quieras. A nosotros nos gusta que se note el picante y que haya suficiente aceite para mojar después con pan. Y para darle un toque distinto, ¡haz un revuelto! Simplemente añade un par de huevos batidos a la mezcla y remueve rápidamente, apartándolo del fuego al momento.
Consejos:
Las gambas frescas tienen un sabor y una textura mucho mejores que las congeladas, pero para este tipo de platos no veo necesario realizar el desembolso porque con gambas congeladas se obtiene un resultado muy bueno. Si fueses a preparar las gambas a la plancha, mi recomendación sería muy distinta 🙂
Por qué pones las gambas, descongeladas en mi caso, a remojo media hora? No se les va así el sabor?
Gracias!
Hola Natalia! Gracias por el apunte, he modificado el texto porque esa indicación es solamente por si tienes que descongelarlas de forma rápida, nada más 😉
Un saludo!