Empanada gallega de bonito y pimientos con masa de empanada casera

Ingredientes

• Para el relleno:
  • 1/2 kg de cebolla.
  • 1 pimiento rojo grande.
  • 2 pimientos verdes.
  • 200 g de salsa de tomate.
  • 300 g de bonito en aceite en conserva.
  • Aceite de oliva y sal.
• Para la masa de empanada:
  • 450 g de harina de trigo.
  • 150 ml de leche.
  • 150 ml de aceite de girasol. También se puede utilizar de oliva pero en mi opinión le aporta demasiado sabor.
  • 1/2 huevo para la masa y el otro medio para pintar la empanada cuando esté lista para entrar al horno.
  • Una pizca de sal.

Tiene un sabor tradicional increíble gracias a su relleno que es todo un clásico en Galicia, al igual que ocurre con las empanadas de vieiras o incluso de pulpo. Lo mejor de todo es que se aprovecha el aceite con el que se elabora el sofrito para darle un sabor muy especial a la masa de la empanada, que además de sencilla es muy rápida de preparar y no requiere ni levadura ni fermentaciones, simplemente con mezclar todos los ingredientes y un reposo de 15 minutos está lista.

Preparación, cómo hacer la receta de empanada gallega

1. Lava los pimientos y quítales el pedúnculo, pela la cebolla y pícalo todo muy finito con una picadora manual o con un cuchillo.
   

   Así entra el pimiento rojo en la Chop Chop…

   

   … y así sale

2. Cubre justito el fondo de una sartén amplia con aceite, ponla a fuego suave e incorpora el pimiento rojo, el pimiento verde y la cebolla junto con un poco de sal y deja que se pochen tranquilamente, removiendo de vez en cuando. Estará todo listo cuando las verduras estén blanditas y la cebolla con un aspecto transparente, tardarán unos 20 minutos. Si se te empiezan a dorar baja la temperatura del fuego ya que debes evitar que se quemen.
   

   Preparamos el sofrito de verduras

3. Ahora coloca un colador grande encima de un bol y pon encima del colador las verduras que hemos cocinado y todo el aceite de forma que reservemos el aceite en el bol para utilizarlo para elaborar la masa de la empanada y nos quede con ese sabor y color tan característico.
4. Devuelve las verduras a la sartén e incorpora la salsa de tomate, revuélvelo todo bien y deja que se siga cocinando a fuego suave 5 minutos.
5. Cuando hayan pasado esos 5 minutos, escurre el bonito, desmígalo un poco e incorpóralo a la sartén. Revuélvelo todo bien de nuevo y apaga el fuego, ya tenemos el relleno listo 🙂
   

   Añadimos el bonito y ya tenemos listo el sofrito

6. Deja que repose y se enfríe el relleno mientras preparas la masa de empanada, estará más compacto y será más sencillo de utilizar.
7. Ahora vamos a preparar la masa de empanada, puedes hacerlo a mano o con un robot amasador, es una masa que se trabaja de forma muy sencilla, de amasado fácil y que está lista en pocos minutos.
8. Echa en el bol que vayas a utilizar el aceite pero ten en cuenta que primero echarás el que habíamos reservado del sofrito y después añadirás más aceite hasta completar la cantidad de 150 ml. Añade también la leche, el medio huevo ligeramente batido (si pesas los ingredientes, el peso del huevo rondará unos 60-65 g así que el peso de huevo para la masa es de unos 30 g), la pizca de sal y la harina.
   

   Ponemos todos los ingredientes de la masa en un bol

9. Si amasas con una amasadora simplemente deja que lo amase todo junto unos 5-7 minutos hasta que el aspecto sea homogéneo, y si lo haces de forma manual primero mezcla un poco los ingredientes con una cuchara y cuando empiecen a compactarse ya puedes utilizar tu mano para ir mezclándolos y amasándolos. Si ves que la masa se queda un poco seca y no se compacta puedes añadir 5 o 10 ml de leche y seguir amasando.
10. Cuando esté lista déjala reposar 15 minutos.
    

    Así debe quedar la masa

11. La masa resultante pesará casi 800 g así que hay que dividirla en dos partes, una un poco más grande que la otra porque será la base. Yo la he dividido de forma que una pesa 450 g y la otra 350 g y les he dado forma de bola.
12. Coloca cada bola encima de un papel de cocina (es una masa con mucho aceite y así no te ensucia ninguna superficie ni se pega) y estíralas con un rodillo según la forma que quieras darle a la empanada. A mi me gusta una forma cuadrada pero también puede ser rectangular o redonda. Eso si, déjala bien finita para que después se hornee correctamente y quede bien crujiente.
13. Encima de la masa más grande coloca el relleno bien repartido pero sin llegar a los bordes y presiónalo con el revés de una cuchara para que quede bien compacto.
14. Coloca encima la otra masa estirada, puedes cogerla con las manos y ponerla más o menos encima y después ir estirándola un poquito para que encaje con los bordes que has creado con la base y el relleno. Debe cubrir por completo el relleno, no debe verse, pero sí que se verán los bordes de la masa base.
    

    Montamos la empanada con las masas estiradas y el relleno

15. Precalienta el horno a 190ºC, con calor arriba y abajo y ventilador.
16. Ahora recorta los bordes de la base para que quede con una forma homogénea y también para disponer de unos trocitos de masa para hacer decoración a tu gusto. La mía ha sido sencilla con los bordes remetidos y bien sellados, unas tiras por encima y lo que no te puede faltar es ese agujero en el centro a modo de chimenea por la que transpirará el interior de la empanada para que salgan todos los vapores durante el horneado y consigamos que quede crujiente y hojaldrada que es de lo que se trata y no se humedezca. También debes pincharla con un tenedor ya que favorece esto que te cuento de la textura.
17. Píntala con el medio huevo que habíamos reservado, con ayuda de un pincel de cocina.
    

    Ya está la empanada lista para hornearse

18. Pon la empanada con el papel de horno encima de una bandeja de horno e introdúcela en el horno a temperatura media. Hornéala alrededor de 45 minutos o hasta que veas que te queda dorada como la mía.
19. Cuando esté lista sácala del horno y déjala reposar con el papel de horno sobre una rejilla hasta que esté templada o se enfríe por completo, según cómo te guste comerla. Idealmente te recomiendo un reposo de al menos 30 minutos antes de partirla.

Tiempo: 2 horas

Sirve y degusta

Esta empanada está deliciosa tanto templada como fría. A mi me encanta probarla cuando ha reposado un rato y está casi fría ya que se parte fenomenal y está exquisita.

Es perfecta para servir como aperitivo en cualquier evento con los amigos o la familia, ya sean cumpleaños, comidas con muchos comensales, o incluso te la puedes llevar fácilmente a un picnic. Además puedes prepararla el día anterior pero te recomiendo dejarla a temperatura ambiente y sin tapar para que no se reblandezca demasiado aunque conforme pasan los días va perdiendo ese característico toque crujiente. Disfruta de su sabroso relleno y de su masa casera y hojaldrada, está de… ¡escándalo!

Empanada gallega de bonito y pimientos con masa de empanada casera

Variaciones

Las empanadas se pueden rellenar con infinidad de ingredientes, desde quesos hasta verduras, carne y también otros tipos de pescado más allá del bonito y el atún, así que puedes ponerte a inventar combinaciones que te gusten. Concretamente las empanadas gallegas más conocidas también se rellenan con pulpo o vieiras y están realmente exquisitas.

Si por lo que sea no puedes disponer del aceite del sofrito para hacer la empanada también puedes añadir un poco de pimentón dulce a la masa para que coja ese característico color.

Consejos

Vigila que no se te pase en el horno, ya que cuando empieza a dorarse un poco cada minuto cuenta y si te despistas puede quemarse en exceso. También sería negativo hornearla menos tiempo del que necesita ya que la masa no llegaría a tener esa textura hojaldrada y quedaría cruda y compacta. El mejor indicador es el dorado que presente.

Si quieres servirla recién hecha pero te vendría genial ahorrar tiempo, puedes preparar el relleno con la antelación que tú quieras y dejarlo hecho en la nevera o incluso congelarlo. Así lo tendrás listo y cuando quieras preparar esta empanada solo tendrás que rellenarla y hornearla, ¡súper fácil y rápido! También puedes dejar en la nevera o congelar la masa para utilizarla más adelante.